miércoles, 8 de febrero de 2012

Yo, el heredero


Esta semana toca hablar de un montaje del Centro Dramático Nacional, al que cada vez tenemos más “aprecio” (hemos conseguido entradas para ver la tan ansiada “Agosto (Condado de Osage)” el sábado próximo y también hablaremos de ella en unos días). Se trata de aquella con la que abrieron la presente temporada, en el caluroso septiembre del María Guerrero. 

Pudimos disfrutar de “Yo, el heredero” el pasado viernes 3 de febrero en el, como casi siempre, Teatro Gayarre de Pamplona.

“Yo, el heredero”, de Eduardo de Filippo, es una crítica feroz a la burguesía, representando a un pueblo harto de abusos de poder por parte de las clases privilegiadas. Cuenta, de hecho, una historia real: Un periodista, amigo del autor del texto, fue despedido de su trabajo por su posición antifascista. Eduardo lo acogió en su casa, y cuando el primero falleció, otro periodista solicitó al dramaturgo ocupar su lugar.

El que la historia fuera un hecho real lo hemos descubierto hace poco y ha sido ciertamente inesperado, pues la historia está contado desde el absurdo más hilarante y hace que veamos como imposibles los hechos que cuenta. 

Ludovico Ribera, magistralmente interpretado por Ernesto Alterio, es un misterioso personaje que aparece en casa de una familia burguesa, reclamando la herencia de su padre, que vivió con éstos durante 37 años. No se trata de una herencia material, pues su padre no tenía nada de capital, sino de la sentimental. Ludovico pretende recoger los frutos de todo cuanto sembró su padre. Si éste se sentaba en un sitio especial en la mesa, nuestro protagonista no permitirá que nadie de la familia ocupe dicho sitio… y así con todo. Gracias a estas ocurrencias tan absurdas, se presentan situaciones que no te permiten ocultar la carcajada, durante la hora y cincuenta minutos largos de función. 

Es una sofisticada venganza llevada a cabo por un hombre completamente convencido de que esta familia en cuestión ha arrebatado a su padre, con su “caridad cristiana”, la posibilidad de prosperar en la vida e, incluso, de hacer una fortuna. De ese modo, Ludovico utiliza los defectos de los personajes para ir introduciéndose sutilmente en una familia en la que todo, aparentemente, funcionaba como la seda.

El texto reivindica principalmente el valor de la libertad de cada ser humano, y la importancia para el hombre de encontrar y perfilar su propio camino.
Se nota que el escritor del texto, de Filippo, era también actor, pues los diálogos están pensados no tanto para contar una historia, sino para el lucimiento actoral y para que las frases, ante todo, suenen de la forma más natural posible.

El trabajo actoral es excelente. Concha Cuetos está magistral, si bien se nota que no es la cuarentona de “Farmacia de guardia”, sigue con sus 68 años al pie del cañón, algo que ya le gustaría a muchas otras. Muy bien Rebeca Matellán, comedida al comienzo y desbocada en el desenlace, obedeciendo al protagonista. Y en cuanto al mismo desbocamiento, quizá sea algo excesivo el de José Manuel Seda, de tal modo que en momentos de mayor intensidad en el montaje, no se nota tanto cambio en su carácter, cuando ciertas escenas deberían suponer un gran cambio en su comportamiento. El resto de secundarios quizá tienen papeles menos lucidos, pero en conjunto, la obra está muy bien interpretada.

Tanto decorado como vestuario son perfectos para la época y el contexto en que se sitúa la obra, por lo que no puede criticarse mucho más, a nuestro parecer, a este montaje tan redondo. El mensaje de la obra puede ser más o menos discutible (el concepto de la caridad puede ser malo para quien es acogido por ella), pero lo que es indudable es que se plantea desde un punto de vista más que válido y argumentado, además de convertirlo en una agradable comedia, algo todavía más complicado si cabe. Si encuentran este montaje cerca de su ciudad, no duden en disfrutar de él. 

Éstas son sus próximas actuaciones:
-Sevilla: Del 8 al 12 de febrero.
-Córdoba: 17 y 18 de febrero.
-Alcalá de Henares – 25 y 26 de febrero.
-Pontevedra – 1 de marzo
-Vigo – 2 de marzo.
-Puerto de Santa María – 10 de marzo.
-Móstoles – 17 de marzo.
-San Sebastián de los Reyes - 24 de marzo.
-Santander – 13 y 14 de abril.
-León – 15 de mayo.
-Oviedo – 18 y 19 de mayo.


Nota: 4/5
"Yo, el heredero", de Eduardo de Filippo. Reparto: Ernesto Alterio, Fidel Almansa, Concha Cuetos, Rebeca Matellán, José Manuel Seda, Beatrice Binotti, África García, José Luis Martínez, Mikele Urroz, Yoima Valdés. Dirección: Francesco Saponaro. Duración: 115 minutos.
Teatro Gayarre, 3 de febrero de 2012.

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